sábado, junio 09, 2007

Mientras tanto el Mar


Las ganas de un carrete desesperado, ansioso, descontrolado y placentero, ocultan sus ganas de esconderse bajo la cama esperando que amanezca. Esta negro todo, pero sigue ahí. En algún pasillo busca abrazos y los encuentra siempre, pero no los que realmente quisiera. En alguna micro incomoda consigue besos extraños, se pone raro. En algún bar se invade de encanto, pero lo desecha. Es que son tantas cosas que le aprietan la mente. El placer no esta por estos días en un orgasmo, tampoco en dar placer. Esta en desprenderse de apoco, en algún momento consigo mismo. La gente le parece normal y no se siente diferente ni disminuido, así que descarta cualquier tipo de depresión o trastorno de personalidad. Las curvas cercanas se vuelven atractivas en la medida que no se compromete. Por las noches extraña, abraza el aire y llora un poco. No siente rencor, solo esta triste.
Todo esto le ocurrió en su rehabilitación, cuando estaba sanando de andar saltando sin rumbo, se estaba estabilizando, sentía lo gratificante que es querer de verdad.
Pero la primera vez que fue sincero, que el amor lo invadía, que todo se estaba haciendo bien…
…simplemente se fue a negro y la luz no volverá, al menos no por ahora.
Mientras tanto el Mar seguira mojandole los pies.